viernes, 24 de enero de 2014

نار الدنيا

نار أحرقت جوارحي
و اشتدّ الصراخ بداخلي
لم يعد الإحتمال بإمكاني
وليس الإختيار بيدي 
عابر انا و ما الدوام لي
خيّرتك فاختاري روحي
بين الصبر او الإقراري
ما الحب الا وهم يظهر لي
إن لم يكن لي و للعمومي
كثرت الأراء و اشتدّ جدالي
حبّ الناس لي يريقني
و عشقك لي يثير غظبي
الكلّ يجري للوصال بدون مشي
و أنتِ راقدة لا تبالين بي
إني قرّرت أن تكونين قدري
إن كان الحظّ حنيفي
العقل إن فكر إجابي
صعب على السقم جسدي




jueves, 23 de enero de 2014

LA JAULA DE LA VIDA

        Nació sin saber porque y a que ha venido y cuales su lugar, en cuando quiso darse cuenta ya tenia 60 años. En su entorno, no era bienvenida porque era la cuarta hembra y el padre estaba loco para tener el barón que llevará realmente su nombre. Aunque no decía nada y sonriendo a la vida, en su profundo ser había una angustia terrible, lejos de su madre y sus hermanos por el mal rollo que había entre sus cuñadas y su mujer. No tenía más remedio que enfrentar  la vida con su optimismo. Los envidiosos se alegraban mucho y disfrutaban la situación de la pequeña familia y decían: Ha divorciado a la prima porque le dio 3 hembras y le ha venido otra que solo le dará  hembras que no era el caso, el segundo si era barón y el cuento en su mente ya ha cambiado. En cuando entró en razón la niña sentía más rechazo y mal trato, sin saber porque, pero porque era la hija de la segundo mujer del padre quién no estaba aceptada y además la niña más bella de la familia entera. A los doce años y de jugar con las demás niñas del barrio a la casa del marido, sin explicación, ni permiso. El primer año no sabía que estaba pasando solo le dijeron que ya estaba casada y que el amigo del padre místico es su marido. En el mismo año se quedó embarazada y tuvo su primer hija con trece añitos. Nada más parir tenía que ir del desierto a la casa de la suegra en el oasis de Tafilalet. Es como salir del paraíso infernal al infierno vivo. Mal trato físico y mental, todos los días y las noche. Con catorce años nació su segunda hija, en la misma semana tenía ya moratones en el cuerpo y la cara, nada más llegar su padre se pegó a él y le dijo:  -Si me dejas aquí en cuando salgas me suicido. El padre quería llevarla unos días con él pero el marido se puso en el medio y le dijo:  -si te la llevas te la quedas. Al oír la palabra te la quedas la pequeño salto sobre el padre pidiéndole que se la llevara de ese lugar que no podía más. Al padre le pareció que era la oportunidad de liberar un tiempo a su pequeña. Por su ingenuidad no paraba de decir que nunca volverá a ese lugar y que no quería ver más al monstruo mal tratador. El místico sentado en el suelo con las piernas cruzadas muy tranquilo, le dijo:  - si quieres el divorcio, lo tendrás solo a una condición; me das mis hijas te doy tu contrato de separación. Sin pensarlo dos veces, arrancó la teta a la pequeña con un mes y se la tiro sobre las piernas y añadió: son tuyas para siempre y no te perdono nada, hasta encontrarnos con el creador. Al volver a la aldea y hasta casarse de nuevo con quince años lloraba todas las noches, añorando a sus pequeñas, sin saber nada de ellas. 
          Se casó con un familiar suyo que , siempre soñaba que sea su marido y lo consiguió era más feliz que nadie. Del desierto al atlas en una cuidad muy bonita y agradable, todo parecía que iba muy bien. Su primera noche saboreó sus carnes como nunca en su último año. Al día siguiente tenía que levantarse sonriendo a la vida si no merecerá su próximo castigo. 
ahí estaba mucho más lejos de su tribu entera y nadie vendrá a salvarla de la bestia que viene todas las tardes de la caserna militar para sacarla a pasear y partirse de risa de ella por su añoranza. Todo era tema de pregunta y la respuesta siempre venía con un desprecio que se quedaba con ganas a que la humillen. Llegó su primer hijo y era barón, pensando que era la salvación pero aun así la maldición no paraba de caerle encima. Entonces se volcó en la religión y sus oraciones día y noche. cada vez estaba más cerca de dios que de los humanos, se levantaba a las cinco de la mañana para hacer la oración del amanecer y pedirle a dios fuerzas para enfrentar esa vida tan triste y cargada de emociones tan negativas que casi no podía aguantar. Su fe cada vez estaba más absoluto y empezó a ver señales de liberación y de la nada empezó a sentir que no estaba sola. Entonces se enfrentó al marido por primera vez y ya no era la última. Dos en mi y uno en ti decía, le pegaba con lo que sea, bombona de gas, olla, sartén o mesa, y le decía: toma la al nombre de Allah. Él era creyente pero no practicaba y sentía miedo por su comportamiento y la fuerza de la mujer, entonces sus vidas eran una guerra a igual. Una noche le dijo : -prepárate
que te iras pronto a la frente. Vivirás la guerra en vivo como lo hiciste con Francia y con los antiguos combaten-tes ah y muy pronto. En la misma semana le convocaron su desplazamiento al frente de polis-ario en el Sahara occidental, de repente se veía sola con dos hijos uno de 3 y una con menos de un año. Ahora su miedo no es a la compañía más bien a la soledad. A los tres meses regresó el marido y como si nada ha pasado, saboreó sus carnes su primera noche y él casi perdió el ojo izquierdo. Al día siguiente se mudaron a una cuidad más cerca del desierto, la casa nueva tenía una energía demasiado cargada y no estaban tranquilos ni ella ni sus hijos. Al mes se fue el marido y la pobre mujer se sentía más sola que nunca, el primer amanecer, se purificó lavándose como siempre. Los niños duermen al lado, extendió su alfombra hacía la Meka, levanto los bracos hacía la cabeza y dijo: Allah Uakbar (dios es grande en árabe) en el mismo instante, se empezaron a tocarse campaña de iglesia o más bien catedral, tan fuerte que temblaba la casa entera. Su cuerpo no paraba de ahitarse solo como si miles de manos la estaban moviendo sin parar. intentaba volverse a la normalidad, pero la pesadilla seguía llevándole cada vez más y más. 
Empezó a insultar al diablo: dios protege me  de satanás. Sin parar hasta que las campanas empezaron a pararse poco a poco. Al día siguiente, era incapaz de levantarse..................................

                                    CONTINUARA MAÑANA.......................      

lunes, 20 de enero de 2014

HISTORIA DE MI TRIBU TURQUÍ segunda parte

      Hoy 20/01/2014

           En la mañana del ataque había muchas novias con los preparativos de la boda, llegaban los bereberes hasta ellas las llevaban como presas y las mujeres empiezan a gritar:
- Hombres de Olad Jrir, vuestras doncellas se convierten en esclavas!
Entonces todos se juntan de nuevo y se peleaban a mano con armas blancas hasta liberarlas y devolverlas al centro. Los atacantes vuelven atrás con su tribu para prepararse al nuevo ataque para llevar las de nuevo. al final todo el mundo participaba en la guerra! las ancianas hacían una mezcla de henna y agua y salpicaban los albornoces de los hombres que huellan del frente, solo les decían: - salpica lo que tengo otro. se derramó mucha sangre en las dos bandas. Había LaArúsi que estaba herido en los dos brazos, su mujer cargaba el rifle y él apuntaba y le decía: - aprieta el gatillo sin mover el arma; una cabeza menos decía ella! así horas y horas, recargar, el apuntaba y ella apretaba!

         El jefe de los bereberes decía al de mi tribu: -rinde te  Buhassún; llevaremos algunos de vosotros y vuestros bienes y así evitamos más muertes. Él re respondía: Es un lagarto en una piedra metido, corta la parte exterior, ponla a la brasa y comete la; y el resto del bicho podrá contigo. Hasta que no entraron los místicos en el medio no paró la masacre, casi acabaron con toda la tribu. murieron muchos hombres de mucho poder físico y espiritual. 

        Al final y en cuando consiguieron la paz, les contaron que había ido otra tribu que se llamaba Doui Mnia a la aldea de la tribu bereber mientras ellos estaban a la búsqueda de las caravanas de seda, llevó a todo el suministro y  las joyas, después de violar a mujeres y doncellas. Al marcharse les dijeron:
- diles que la tribu Olad Jrir ha estado aquí y si tienen algo que decir que ya saben donde estamos. 
         la guerra ha marcado un antes y un después en la historia de las tres tribus. Odio, reproches y mal trato entre ellos. Hasta hoy en día y sigue por desgracia mucho racismo entre ellas en general.

                     Pasaron muchos años hasta que la tribu podio recuperarse de nuevo, hasta que llego la primera guerra mundial que les calló la segunda desgracia. Los franceses preguntaron por los mejores rebeldes en Tafilalet, sureste de Marruecos que nunca llegaron a conquistar. Les dijeron que son los bereberes y los Olad jrir. El capitán francés dijo a Moulay Mohammed: -te nombro rey de Tafilalet si consigues traerlo hasta mí. les convocó una cita invitándoles a que se juntan con él para la lucha contra los francés. Se fue la mayoría de los guerreros. Entraron en la casaba Abú Aam, les había preparado una bienvenida a lo alto. Entraron a la sala de invitados. les encierro a todos y sellaron las puertas y las ventanas era invierno y hacía mucho frío; por el paseo de luz  en el tejado les tiraban agua sin parar toda la noche les llegaba el agua hasta el pecho. Estaba exhaustos y congelados. había hombre de más de dos metros una bestias en la guerra pero estaban engañados por un tramitador y no hay nada que hacer. al Mismo tiempo mi abuelo llevaba al resto de la tribu mujeres y niños con algunos hombres más hacía Erfoud. En la mitad de la noche de camino, mi bisabuela le decía: -no quiero seguir andando estoy congelada y todo el mundo esta igual y haznos una hoguera aquí mismo y prefiero morir que llegar a los franceses. Había arbustos y yerbajos gigantes, montaron un fuego inmenso y pudieron entrar en calor al final. antes del amanecer a mi abuelo le llegó la noticia de los hombres atrapados. entonces levantó a toda la tribu y ordenó a todo el mundo a seguir le hacía Erfoud. Mi padre y todos hermanos sobre una burra en los bolsillos del saco de hojas de palmeras, todos atacados de frío y miedo. Mi bisabuela le dijo: de aquí no me muevo, déjame aquí, no temo la muerte además ya se han muerto todos mis hombres que más da si voy yo también a encontrarles. La noche interior, había soñado la pobre que muchos hombres de su familia estaban atados a troncos de palmeras y que había una riada muy fuerte que les golpeaba los cuerpos contra los troncos. Mi abuelo conocía a su madre y tenía que salvar a los demás se despidieron llorando y se fue. 

       Al día siguiente los hombres eran como trapos sin fuerzas, al abrir la puerta intentaron luchar pero nada. Les esposaron a todos y les ataron a troncos de palmeras. En cuando estuvo ahí Múlay Mohammed, se acercó al primero y le decía: di lo que quieras nómada estas muerto. El guerrero le escupía en la cara y decía: diré: Fátima hija del profeta, soy tu invitado hoy, aprieta el gatillo perro francés, arderás en el infierno con los que son como tú. 

         Mataron a 80 de ellos, El falso rey se fue a caballo a presumir del verdadero rey Belkasem y declararle el trono. Nada más llegar, tenía el látigo en  la mano, directamente le dio a la espalda; Belkasem tenia su revolver en su cintura lo sacó y le pegó un tiro. Monto el caballo y se fue a Abú Aam. En cuando le vieron todos empezaron a gritar: -dios bendiga a Múlay Mohammad y da poder a Sidi belkasem. Él si era amigo de mi tribu se han apoyado en muchas ocasiones, ordenó que les sueltan, darle de comer y abrigos. Mi bisabuela..... 

                                    Continuara mañana........

jueves, 16 de enero de 2014

HISTORIA DE MI TRIBU TURQUÍ Primera parte

           Día 16/01/2014
           Enfrentando el 2014 con mucho ánimo y ganas de vivir, vino a visitarse mi hermana Hassania del desierto y su hija de 34 años que vive en lausanne Suiza. Realmente no hay mejor que tener familia en casa y reírse mucho es la clave de sobre vivir estos tiempos tan extraños que estamos viviendo todos. Mi hermana se caso a los 12 años y se divorció a los 15 años dejando atrás a dos niñas a precio de su divorcio. realmente hasta que no se casó con su segundo marido no ha parado de llorar y sufrir. después la felicidad ha sido un espejismo que nunca llego a sentirla. Conflictos y maltratos hasta hoy. El machismo vivido por las mujeres del mundo no es más que señal que la ley se la ha puesto el hombre a sus anchas; sin valorar a la esencia de la vida, que es la mujer. Si conseguimos la armonía entre los dos sexo la vida tendrá otro sabor. Mi sobrina al contrario que su madre, con todos los problemas que pueda tener, convierte todo en risa. Entonces es la alegría en vivo, tengo agujetas en el estómago de tanta risa, la pena que acaba de irse hoy después de perder su vuelo de vuelta que era a las 9:30 de la mañana y ella pensaba que era a las 16:30, así he tenido tiempo para estar con ella unas cuantas horas más y me hizo mucha ilusión. hicimos la reserva por Internet, le imprimé la reserva y todo parecía normal. comimos riendo nos sin parar.
Cogieron el autobús al aeropuerto, por la tarde en cuando estaban en la terminal 1, en información le dijeron que no era ahí, pero ellas no entendieron nada ya que no hablan español muy bien español. a mi sobrina casi le daba un infarto, hasta comprender que era en T2 pasó una hora y casi perdía otra vez el billete. Mi mujer con mi niña y mi hermana se perdieron en el aeropuerto y tardaron más de dos horas en llegar a casa. El idioma es la lleve del entendimiento.    
         
          Mi hermana en cuando le pregunto cualquier cosa sobre historias de la familia o la tribu, suelta riendas a sus recuerdos y no para, anoche tuvimos debates sobre la igualdad, la religión, la relaciones entre occidente y oriente y sobre el amor. En cuando nombré nuestra tribu ni me dejó expresarme, solo empezó a rebobinar y a hablar, para mi ha sido un mangar de palabras y historias para refrescar todo lo que me contó mi padre ya que su enciclopedia básica era él.
           - somos descendientes de los Otomanos, se refugiaron en las montañas de Bechar Argelia actualmente pero es marroquí.  -me dijo.



            se supone que se escaparon de la persecución de los españoles y los bereberes a la vez. Al llegar a la tribu Ait Hammú, pidieron la hospitalidad de tres días como dice el Islam y de ahí no han salido hasta fondear de nuevo nuestra tribu. Eran dos hermanos Abderrahman ben Turquí que soy descendiente y de ahí viene mi nombre, era sabio del Corán y tenía el sello de hacer copias. y Ahmed ben Turquí, un guerrero nato. al segundo día de estar, salieron a la caza, Hammú al ver los buenos y expertos que eran les dijo:  - ¿a donde os dirigís? - mejor que aquí no hay ningún sitio. El el bereber tenía 9 hijas y se casaron cada uno con una, llegaron mas primos Otomanos, se instalaron con ellos y se casaron con más bereberes y de ahí empezaron a crecer con su sabiduría en religión y guerra. La vida sonrió de nuevo a la familia, prosperidad, paz, armonía y mucha abundancia. Construyeron mezquitas, escuelas coránicas y empezaron a conquistar todas la tribus de alrededor. Tenían esclavos, riqueza y mucho poder. En primavera bajaban a los pastos de las llanuras, se instalaban sus jhaimas (tiendas de campaña hechas con pelo de camello), cazar ciervos, gacelas y muchas aves. pasaron muchas décadas y la tribu ya era conocida en todas partes. había muchas tribus bereberes muy fuertes también y había veces que se juntaban para conquistar alguna tribu africana y llevarse mucha riqueza y escalmos. En la misma tribu nuestra había ya muchas ramas y la mía era tribu Olad Jrir; eran muy nobles y muy pacíficos pero muy guerreros, ganaban el respeto de toda la vecindad con su ego y su hospitalidad. 

     No todo lo que luce es oro. La primera desgraciada que calló sobre ellos ha sido sin ninguna culpa de su parte. En cuando quisieron enterarse, estaban rodeados ya 7 veces por una tribu bereber que se llamaba Gannami. Estaban festejando las bodas de la primavera. Fiesta en que se casaban todos los prometidos del año. Bajaba toda la tribu a las planadas del  desierto niños, mujeres, esclavos y hombres con su tropel de camellos y todo tipo de animales. Lo festejaban a lo grande días y días de alegría, alaridos, baile y mucha música.  No faltaba nadie todos los Olad Jrir estaban ahí. Le piaban de sorpresa en pleno festejo y estalló la guerra. Un tuareg, siempre esta alerto y con su arma encima. Juntaron a las mujeres, niños y ancianos en el medio y los hombres, adolescentes  y esclavos en la frente. Mandaron a pedir ayuda a los Turquís vinieron los más cercanos. había otra tribu se llamaba Doui Mnia, tenía muchas ramas, se supone que eran amigas con las nuestras. acudió algunas que al ver la masacre huyeron sin mirar atrás excepto una  que se llamaba Oulad belguiz que se metió en el follón;  -hasta la muerte con vosotros. -decían. 
                                        continuará mañana es hora de ir a casa!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
                           


miércoles, 15 de enero de 2014

FRONTERAS

   


           Durante muchos años, el desierto fue un territorio libre, sin fronteras; Podías desplazarte sin pensar en e nombre del país que pisabas. Como suele pasar, la política lo estropeó todo. En el años sesenta se trazó una línea imaginaria que marcó la frontera entre Argelia y Marruecos. Un poco como ocurrió cuando construyeron el muro de Berlín, solo que en el desierto. Muchas familias se rompieron de la noche a la mañana, hasta hoy. La mayoría de mi familia se quedó en Argelia; la mía en Marruecos. Durante años no tuvimos contacto. cuando vinieron a vernos en el año 1988, a Erfoud, yo flipé, yo era ya tatartío, han venido todos, Hermanas mías de parte de mi padre que era de la edad de mi madre, sobrinos ya abuelos, tíos, tías y primos; había una prima de mi edad, preciosa, con ojos verdes, tuvimos un flechazo total. Nos enamoramos como dos tortolitos. Durante las semanas que duró la visita, nos veíamos siempre que podíamos, a escondidas, nos besábamos y acariciábamos y restregábamos hasta corrernos. Por supuesto sin desnudarnos; Tenía que llegar virgen al matrimonio. Como todas las mujeres musulmanas. Claro que unas llegan más vírgenes que otras. A buen entendedor, pocas palabras. En el medio en que crecí, Había mucha hipocresía en relación al sexo. la religión y las formas de pensar. No estaba bien visto que alguien pensara ni obrara por su cuenta. Cuando era pequeño, los niños acostumbrábamos a dormir juntos, y nos tocábamos, claro que nos tocábamos. Para mí era natural, me parecía lo más normal del mundo. Cuantas más barreras pongas a tu personalidad, más complejos tendrás en el futuro. Una parte de mí luchaba contra mis sentimientos; estaba en crisis con la religión, la familia, las costumbres; Pero al final siempre ganan tus emociones. 

      Mi hermana pequeña y yo teníamos otra mentalidad. No hacíamos caso de la religión, pensábamos de otra forma. yo no he vivido como mi padre, cazador, guerrero y sabio. Nos enseñó a todos sus hijos, chicos y chicas a disparar y en cuando había cualquier feria, nos llevaba a los puestos del tiro, controlaba las escopetas y nos hacía concurso de quien tiraba mejor, que tiempos eran, siempre la gente se quedaba boquiabiertas al vernos apuntar tan bien, sobre todo las chicas.

    Fui el primero, de toda la familia Belarbi, en ir a la universidad. El primero de mi tribu. Mis hermanos mayores no quisieron. Uno se hizo militar, y los otros no quisieron saber nada de estudiar. En el colegio yo aprobaba con facilidad, sin estudiar apenas nada. Lo que me gustaba era cantar. Con 17 años, con unos amigos, montamos un grupo de música; hacíamos una especie de fusión, que ahora está tan de moda, con guitarra eléctrica e instrumentos de percusión árabes, como la darbuka y el oud. Yo era el cantante. Dimos unos cuantos conciertos, pero a mi padre no le gustaba nada.
    - Si cantas, no eres mi hijo -me dijo-
si quieres ser mi hijo, estudia. Ya ha pasado la época de las caravanas; ahora estamos en la época de los bolis.

      Obedecí a mi padre. Dejé de cantar y me fue a estudiar a la universidad de Meknes.
Quiero decir que dejé de cantar profesionalmente, porque seguí cantando para mí mismo y siempre que tengo ocasión, canto. la música árabe es fascinante. hay cantantes magníficos, sobre todo los clásicos para mi gusto. algunos de ellos no están demasiado lejos del flamenco. al fin y al cabo, la música es emoción, y las emociones son las mismas en todas partes, en el desierto y en las ciudades.

     Duré poco en la universidad; estudiar no era lo mío. Lo único que me gustaba en mi vida han sido las idiomas. Aprendí francés e ingles, y más tarde el español. Los idiomas me gustan mucho. decía mi padre: - ¡como me gusta escucharte hablar idiomas! "si hablas dos idiomas, eres dos personas. Yo hablo cuatro, de modo que soy unas cuantas personas. A ninguna de esas personas les gusta leer. he leído poquísimos libres en mi vida. Prefiero observar y escribir las cosas que se me pasan por la cabeza.

    Solo estuve dos años en Meknes. Aguanté por mi padre, aunque me parecía una perdida de tiempo. Si hubiese tenido siete vidas, habría regalado una a mi padre y acabado la carrera. Tenía que vivir mi propia vida, tomar mis propias decisiones, aprender de mis propios errores. A mi padre no le gustó, pero tampoco se opuso. Durante años hice de todos y estuve en todas partes: un par de años en Casabalanca, trabajando con el amigo judío de mi padre; Una temporada en Fez, ayudando a un amigo en un negocio de pastelería; de fotógrafo en Erfoud, sacando fotos de bodas y fiestas familiares; con un  poco de dinero que tenía ahorrado, compré una cámara e instalé un pequeño laboratorio en casa; al principio no tenía ni idea, pero poco a poco fui aprendiendo y llegué a ser un fotógrafo bastante apañado. Del mundo de la fotografía aparecieron las cintas de vídeos y salté al mundo del cine. Empecé a alquilar cintas de vídeo. Mis mejores clientes eran los profesores de la escuela hostelería y siempre me proponían estudiar y sacarme el diploma. al final les hice caso y otra vez al mundo de los estudios. En el primer año, me mandaron de practicas a Agadir al suroeste de marruecos y ahí empezó mi historia hacía mi viaje a España. 





martes, 14 de enero de 2014

ERFOUD

Después de abandonar mi pueblo natal a su suerte, al igual que muchos familiares y amigos, nos trasladábamos a Erfoud a 65 km al norte de Merzouga. Muchos más se fueron a Bechar que era ya argelino y con las ayudas que daba el país, Muchos no dudaban en inmigrar ahí. Las cosas estaban cada vez mejor para mi familia. El alquiler de las cinco tiendas en el centro del pueblo cerca del mercado y el salario de la empresa francesa para la que trabajaba mi padre estaba mucho más a gusto, aunque le costaba separarse de su madre de casi cien años; estaba viviendo entre mi casa y la de mi tío pero cada vez estaba más con su hijo menor y mi padre le echaba mucho de menos.

  Erfoud es una población situada al final del valle del Ziz, a unos 280 km al sureste de Meknes, es la puerta de entrada al Sáhara. En su origen fue una guarnición francesa, construido en 1967 con el fin de pacificar y controlar el sureste de Marruecos ya que la resistencia estaba en Tafilalet (Risani actual).

    El río Ziz corta una valle profundo, rodeado de peñascos de todos los tamaños y formas que uno puede imaginar. Hay la reserva más grande de palmeras del norte de África y muchas plantas a lo largo de sus riberas.

     Erfoud nunca fue una ciudad bonita; ni siquiera antes, cuando todas las casas eran de adobe, (ahora es todavía peor: el adobe ha desaparecido; ha sido sustituido por hormigón y otros materiales modernos, cuando está demostrado que el barro es mucho mejor aislante para el frío y el calor del desierto. El problema del barro es que da trabajo, hay que restaurarlo de vez en cuando, sobre todo tras las lluvias torrenciales. Las nuevas generaciones prefieren materiales que no den trabajo, aunque sean peores y mal hechos). es una ciudad un poco fantasmal, con sus edificios rojos y polvorientos, azotada por frecuentes tormenta de arena. En el actual ha ganado algo, por la cantidad de hoteles de lujo y riads bonitas que han construido. Solo tiene interés por ser un lugar de paso para la gente que quiere visitar las dunas de Merzouga o el oasis de tafilalt, un inmenso palmeral de 90 kilómetros, con más de 170 000 palmeras datileras. Alrededor de las dunas de Merzouga hay albergues y restaurantes de nombres exóticos, como Elfaris (el


caballero) diseñado y construido por mi hermana mayor, Yasmina, la caravana, Estrella de las dunas, Dunas doradas, o el Atlas de Arena, un restaurante cuyo dueño se llama Ali el cojo, tiene la pierna derecha cortada a la altura de la rodilla, anda con muletas con una rapidez asombrosa, había que verle moviéndose entre las mesas, sirviendo a todo el mundo y con una sonrisa siempre puesta.

   En mayo hay un festival de música Gnawa(música del desierto) y danza árabe, donde se juntan músicos de todas partes del mundo; Es una semana de festejo y alegría y mezcla humana muy interesante en todos los sentidos, además de música y danza está la gastronomía, excursiones y encuentros de gente muy interesante, además de la belleza del lugar que no deja de ser percibido ya que atrae a todas las campanias cinematografías de todo el mundo.

   Al principio en Erfoud, nos instalamos en el barrio judío, en casa de un amigo de mi padre, mientras construía nuestra casa. Mi padre tenía 60 años cuando yo nací. No sé como sería cuando era joven, mis hermanos me decían que era demasiado serio y que daba miedo sin hacerles nada, pero el padre que yo conocí era un hombre sabio u justo, respetado y querido por todo el mundo. Se llevaba bien con todos, árabes, bereberes y judíos. era muy amigo de sus amigos. Hay una anécdota que ilustra la relación de mi padre no sólo con su amigo judío, sino con todos sus amigos. cuando yo tenía veinte años, trabajé en una empresa que el amigo judío tenía en Casablanca. Mi padre vino a verme. la familia del amigo festejó su visita por todo lo alto. Todos se reunieron en honor de mi padre. En mitad de la cena, el judío se puso en pie, puso un brazo alrededor del hombro de mi padre, y delante de todos, dijo: Os juro, por el amor que os tengo, que quiero a este hombre más que a todos vosotros juntos. yo me quedé boquiabierta y muy nervioso. Mi padre al revés se hecho a reír y dijo: claro que nuestro amor es distinto al vuestro, y yo estoy solo contra todos.

   los dos amigos tenían discusiones muy divertidas sobre muchos temas. El judío tenía mucho dinero, y se pasaba el día contando billetes y monedas. Mi padre ya conocía ese tipo de vida y no le impresionaba. También discutían sobre religión. Por la tarde estaban tomando el té enfrente de la chimenea del lujoso salón y saltó el amigo: - Bouziane mira, mira el fuego donde vais a arder los musulmanes, es vuestro destino, el infierno, mientras que nosotros vamos al paraíso, medio en serio, medio en broma.

    Mi padre se echo a reír. -¿Ah, sí? ¿tenéis garantizado el paraíso? ¡Que suerte! Yo lo dudo. Vosotros nunca estáis de acuerdo con los demás. No admitís a las otras creencias, hacéis como si no existieran, además vuestros libros están tan manipulados que ni vosotros mismos os ponéis de acuerdo. En cambio nosotros no tenemos problemas con nadie; admitimos a todos los libros y a todos los profetas, y si no creemos en los anteriores libros, es como si no creemos en Allah.

   Su amigo le miraba con el ceño cómic-amente fruncido. 
-¿que quieres decir? ¿que yo voy a ir al infierno?
   -No, hombre, no he dicho eso, solo respondo a tu comentario, amigo mío.
   -Cómo que no, cómo que no; es lo que has dicho.
   -bueno, al fin y al cabo, si estamos sentados aquí juntos, a lo mejor nos sentamos también en otro lugar, incha Allah.

    El barrio judío era laberintos de calles con casas de adobe y patios de luz, casas con ventanas pequeñas y puertas que daban a la callejuelas. Las casas estaban pintadas de colores y eran más aireadas y frescas que las de los árabes. Los judíos llevaban el comercio de telas, alimentación, oro y muchas otras cosas; dejaron el desierto cuando yo tenía diez años. Los niños musulmanes nos portábamos fatal con ellos. Les hacíamos putadas de todas clases. Obligábamos a los niños y adolescentes a pronunciar el nombre de Allah y su profeta Mohammed. Cuando se encontraba alguna tinaja rota en alguna  esquina, decían: -Otro judío obligado a reconocer el Islam. ¡Al amanecer las madres llevaban la tinaja, y decían al niño que repetía las palabras que lo han obligado a decir, dentro de la tinaja y la rompían para limpiar su alma del Islam! 
Derramábamos los granos de café, si no nos daban los garbanzos que las mujeres tostaban a la puerta de sus casas para mezclar el café; Nos metíamos en medio de la procesiones, cuando llevaban a sus muertos, cantando oraciones a Allah. Ellos soltaban al muerto desde sus hombros al suelo para purificar su alma. Nos perseguían, indignados de nuestra conducta. Cuando mi padre se enteró, por poco me mata a mi y a mi hermana mayor. No eramos consientes del daño que les estábamos causando, hasta que se fueron todo a mediados de los setenta que nos entraba el mordimiento de la conciencia, pero ya no estaban ahí para pedirles perdón y claro todos habíamos borrado los recuerdos de nuestras memorias avergonzados de nosotros mismos.

   Nuestra casa nueva estaba cerca del mercado. En los mercados se podía encontrar de todo; Además de hortalizas, cereales, frutas y toda clase de productos de la tierra, había también artículos de artesanía local, cestería, ferretería y carpintería, joyas de oro y plata; tenderetes de productos de farmacia tradicional, que a mí me impresionaban muchísimo y me siguen impresionando, animales disecados o enjaulados, tortugas, lagartos, bichos del desierto. Un poco más allá del mercado se hacía la compraventa de animales: Corderos, ovejas, terneros, camellos, asnos, de todo menos cerdos, que están prohibidos por la religión musulmana.. Que tiempos eran, los de mi padre y los nuestros antes y los tiempos de ahora. 
  -¿Algún día volveremos a convivir todas las razas y creencias juntos en paz y armonía sobre  la faz de este globo? Me gustaría vivir para vivir lo y sentirlo en mi propia piel. 


 

LOS NÓMADAS DEL DESIERTO

                     

Los nómadas vivían en mucha más armonía con su entorno que ahora que están más desarrollados, todo el mundo vivía con lo justo y siempre buscando su auto suficiencia. Ahora la mayoría quiere forrase sin importarle los demás, en mi casa me acuerdo que convivimos con animales de todo tipo, había habib. Era un erizo domesticado y no paraba de dar vueltas buscando alimento, era uno más, cuando murió hubo una tristeza enorme en los corazones de toda la familia, la vecindad se le notaba también. En el desierto hubo muchas familias que les acompañaba en su mascota algún erizo, a los erizos les encanta las hojas del té ya hervidas y blandas, a cambio protegían la jhaima(tienda de campaña de pelo de camello), son magníficos cazadores, capaces de enfrentarse incluso a las serpientes.los gatos no pueden con ellas, cuando las ven se ponen a maullar como locos y hasta que no aparecían los dueños no paran. Algunos abandonaban el gato en su lucha, y solo se repita: Serpiente es. Algunos gatos llegaban a pelearse con ellas y si conseguían arañarla, se marchan porque saben que ya está muerta, las hormigas amarillas del desierto son limpiadoras en cuando hay algún animal herido que se despida de la vida, porque donde este está localizado ¿cómo? nadie lo sabía, pero en la naturaleza  todo es posible. Los erizos, en cambio, les hacen frente su técnica de lucha es muy simple: muerden a la serpiente donde sea y se encierran, el pobre animal destroza a si mismo con las púas. Al erizo solo le queda esperar la recompensa. En cuando hay bebes en la familia el erizo no está bien venido, es fácil que por las noches y en cuando todo el mundo duerme que muerda al niño la oreja para comerse la, sin querer pero lo hace, su instinto le índice y puede que mate a un niño si la madre se despista y lo deja en el suela destapado, puede comer le sus partes genitales por lo que sea, al ser más blandas, el olor o su instinto de matar.


Las tribus por desgracia no siempre estaban en paz, en cuando surja el conflicto llega el estado de guerra. La vida es mucho más dura, no solo la lucha por la supervivencia, el calor infernal del verano y el frío espantoso del invierno, la escasez de agua y alimento. Lo peor eran las guerras  tribales, los jóvenes muertos en las batallas, familias destrozadas. Todos intervienen en la guerra, hombres y mujeres. Mientras ellos peleaban, algunas daban alaridos para asustar al enemigo y fortalecer a los suyos, otras vigilaban para que ningún hombre rehuyera la lucha. Hacían una mezcla de agua con henna, con la que salpicaban los albornoces del los cobardes que huían. La gente no tenía dinero para cambiar de albornoz, así todo el mundo les reconocía y se avergonzaba de ellos. Una de las batallas que hubo entre mi tribu y otra bereber ha sido de las peores de la historia de los turquís. Hubo una tribu prima de la nuestra que atacó a los bereberes en sus casas cuando estaban a la búsqueda de las caravanas de seda. Mataron violaron y se llevaron todo lo que pudieron, en vez de decir somos la tribu ganami (una tribu prima) dijeron que eran los Turquís. Toda la rabia calló sobre mi tribu, hasta que no intervino (zawya sidi el Madani amigo de mi padre) es una tribu santa reconocida por todas las tribus, solo los místicos, eran capaces de detenerles, eran nómadas que se desplazaban por el desierto sembrando paz y oración entre la gente. En ese sentido entiendo mucho a las religiones. Son códigos o catálogos de saber vivir, aunque cada vez nos van pareciendo anticuados pero proporcionan una forma de vivir mucho más harmoniosa. Alejada de la realidad pero eficaz. Entran en la Tribu ganadora con sus animales sacrificados como ofrenda y echan sus turbantes en el suelo símbolo de que están muy ofendidos. Para ellos  está claro que: ¡si no haces caso a los intermediarios del creador se te calle la maldición pronto y todo será al revés y desearías que los santos se metieran para salvarte y nadie acude a tu salvación! mi tribu estaba rodeada 7 veces gente muriendo por los dos lados. En un atardecer y desde lejos salto el bereber capitán del grupo: -Oye me Buhasssún el día no es tuyo, rindete tu tribu se salvará lo que queda, llevamos a algunos de vosotros, vuestra reserva y vuestras joyas, así evitamos más perdidas. Mi tío abuelo le respondió: -Es un lagarto en una raja de roca, corta la parte trasera, pon la a la brasa, te la comes y el resto del bicho puede contigo. (El lagarto bebe el aire, come bichos y se esconde dentro de las rocas, puede que su cola este fuera pero es imposible sacarle. Se puede llevar la cola si uno quiere pero el tronco se queda dentro. Tiene unos músculos en el cuello que tiene la potencia de un toro, apoya la cabeza contra la roca y no hay quien le saque). Había un familiar herido era uno de los mejores tiradores se llamaba Faraji, no podía recargar el rifle solo, su mujer cargaba y él le decía: -dime ¿cuál de las cabezas quieres? Solo apretaba el gatillo y le decía: ahí lo tiene. Se veía la parte superior que resalta  del mural que fabricaban de sacos para protegerse volando en pedazos. Pero no había tiempo que perder, recargar elegir y matar. Algunos de la tribu prima que estaban ayudando. Al escaparse las mujeres les manchaban con la mezcla, ellos decían marca lo que tengo otro. Nunca un turquí deja a un amigo o a un familiar si está contigo, en las buenas o en las malas siempre está. Pero también se decía: a un turco mejor tenerlo delante y no atrás. Hasta que los santos no han derramado sangre de las ofrendas no paró la guerra. Después de años de paz entre ellos, hubo odio y rechazo entre generaciones, cada uno con su orgullo en el aire, aunque eran y desde el principio cuñados. Cuando se refugiaran nuestros ante pasados otomanos en las montañas de Bechar en Argelia, los quienes les recogieron eran los bereberes y se casaron casi todos con mujeres bereberes, así que eran todos de la misma familia. 

Los jefes de la tribu era dos hermanos, Ahmed ben Turquí, era sabio en la guerra y Abderrahman ben Turqui que soy descendiente, era sabio en el Islam. Tenía el sello de hacer copias del Corán, el libre sagrado de los musulmanes. se complementaban y a lo largo de los años han podido restablecer la paz y la armonía entre las tribus nómadas del desierto del norte de África

lunes, 13 de enero de 2014

BACAS FLACAS

Como suele decirse, no es oro todo lo que reluce. El dinero trajo felicidad y prosperidad, pero la envidia sembró su cizaña, hubo problemas entre los hermanos de mi padre. Diferencias de criterio sobre la forma de llevar el negocio. Nada podía molestar más a mi padre que las riñas familiares. Para él, son los hombres quien deben tener el control del dinero. tenían una habitación con toda la fortuna, y cada vez que veía a la mujer de su hermano mayor con la llave en la cintura, comenzaba la discusión de siempre; -Como lo ves hermano? somos 3 hombres y una mujer lleva la llave? Si no puedes llevarla tú, dámela o dásela a mi madre, o no? Vale respondía el hermano mayor y a lo largo de unos días se repetía la escena. Además de problemas familiares, empezaron los profesionales. Todos sus empleados les hacían trampas, mezclaban piedras con minerales y le engañaban en el peso de las toneladas. cosían el peso de 10 kg en el saco, entonces la empresa compradora le reclama toneladas de mineral y se quejaba de la mezcla del mineral con piedras. Con todo este tinglado, encima van y le denunciaban al alcalde del pueble. A mi padre le sentó como un tiro al corazón; eran todos familiares y amigos, árabes y bereberes y por tema de dinero estaban en estado de guerra. Cuando estaban en frente del alcalde, en un lado mi padre solo, sin sus hermanos que no querían estar presentes y los demás representantes de los empleados. En cuando mi padre enseñó las reclamaciones de la empresa; directamente les hecho a todos a la calle y les dijo: -porque Bouzaine os ha perdonado si no os meteré a todos en la cárcel unos días para que os educan un poco, sin vergüenzas. Mi padre muy dolido salio de la sala y directamente se fue hacía las minas. en la colina más alta se orientó hacía la Meca y hizo su oración, en ella pedía a Dios que se llevara su fortuna, que todo volviera a ser como antes. 

Se paró la excavación unos días y en cuando se pusieron de acuerdo sobre la reanudación del trabajo, se fue el primer grupo al amanecer, dentro de la mina todo era normal. espejos por todos los lados, el mineral era grafito, además del khol para los ojos, se fabricaba muchas cosas con el. 
Con los primeros golpes, se caía la capa fina del mineral y después todo carbón; Una polvareda, impresionante, todos salieron asfixiados, sin poder respirar.

Como si Allah le hubiera escuchado, el yacimiento no dio más de sí. Tuvieron que cerrar el negocio. Con los fajos de billetes acumulados bajo las alfombras, mi padre siguió aún así manteniendo a todas las familias que trabajaban para él! Hasta que se quedó sin un céntimo.
-ahora estamos todos iguales -dijo, con la tranquilidad de quien se ha quitado un peso de encima. 

Cuando yo nací, habían llegado las vacas flacas. Todo había terminado: oumfis, el   pueblo fundado por mi padre, estaba en las últimas.

Para salir adelante, mi padre tomó una decisión drástica: decidió trasladarse a vivir a Erfoud, donde tenía una casa en el centro del pueblo, donde crecí yo y alquilar parte de la casa. De la noche a la mañana, sin pedir permiso, por su propia cuenta y riesgo, abrió cinco puertas a la calle.

Como es lógico suponer, se le echó encima la autoridad competente. El alcalde le citó en su despacho.
-¿Pero qué te has creído? - le dijo, con una falta de respeto que nadie en el pueblo se hubiera atrevido a cometer. Era un joven funcionario de origen de Rabat, de mentalidad moderna, que apenas conocía, ni le interesaba, la historia ni las costumbres del lugar-. No puedes abrir cinco puertas a la calle, así como así, sin pedir permiso.
-¿Sin pedir permiso? ¿En mi propia casa? En mi casa hago lo que me da la gana, -respondió mi padre, sin mover una ceja. Se dio la vuelta y salió del despacho. La cosa no quedó ahí. El alcalde no conocía a mi padre, y siguió buscándole las cosquillas. Le envió cartas, le amenazó con meterle en la cárcel. Mi padre ya furioso fue a verle. -¿Me estas buscando? - Le preguntó.
- La ley es la ley, y va por todos, ¿lo sabes anciano? Y hay que cumplirla. Él que no la cumple va a la cárcel. - Pues iré a la cárcel joven.
Salió del despacho, pero se detuvo en el umbral, se dio la vuelta, miró al alcalde, extendió el brazo, apunto con el dedo y hizo el gesto de apretar el gatillo tres veces con el sonido de las balas con su boca y se fue sin mirar atrás. 

pocos días después, el joven funcionario fue trasladado. El alcalde que nombraron hizo de tripas corazón y no puso inconveniente al negocio inmobiliario, hasta se hicieron amigos y iban a la caza juntos durante mucho tiempo.

Mi padre no tardó en encontrar empleo. Con la experiencia adquirida en la extracción de mineral, empezó a trabajar para la empresa minera francesa que la vendía antes. Aunque nunca leyó un libre de geología, sabía más que muchos licenciados de las mejores universidades. Vestido con su chilaba, sin necesidad de ningún aparato, con la única tecnología de su instinto, enseguida sabía dónde había que empezar a trabajar. Los geólogos le miraban con escepticismo, pero el tiempo acababa siempre por poner las cosas en su sitio. mi padre casi siempre acertaba, para desesperación de los licenciados, que no daban una los pobres.

Las matemáticas también eran su habilidad, era capaz de contar y hacer cálculos sin calculadora, a lo mejor usaba algún papel y bolígrafo y poco más, siempre acertaba. Una de las veces estaba con el director de la empresa rectificando los cálculos y en cuando estuvo el contable con ellos, mi padre le comentó que había un error, pero el contable se ofendió mucho y en cuando rehízo sus cálculos que lo costó mucho tiempo, se dio cuenta de su fallo y tenía que disculparse a mi padre y al director. Aun así mi padre solo le hizo mucha gracia y le dijo: - en los fallos reside el prendierais, hijo. Mi padre tenía sus nervios siempre en un congelador bien cerrado. ¿Como lo hace? Paciencia dirá seguro.





sábado, 11 de enero de 2014

BEBE TERRORÍFICO

¡AÑO 2014! Los Hombres

Cuanto más conozco a los hombres, más amo a la vida y al pensamiento. Las locuras son fruto de nuestra imaginación, o realmente las buscamos nosotros mismos. A falta de solidaridad, si solo pensamos en nosotros mismos, sin importarnos los demás, eso hace que nos sentimos solos en esta vida. No estoy solo y nunca lo estaré. Mi deseo es poder aislarme una temporada, en las planadas del desierto. Conocerme a mi mismo lo más posible. Mi padre me contaba que en varias ocasiones, ha tenido la oportunidad de estar asolas con si mismo, su camello y su flauta. Tenía su autosuficiencia en alimentos, sobre todo dátiles y agua. conocía el desierto como la palma de su mano o más! En la faceta de militar, tenía que llevar el correo hasta Tindúf, que según él era Marroquí. hay veces que iba encima de su camello sin parar. llevaba leña y tenía una placa de yerro apoyada en dos troncos de madera. en ella hacía el té y cocinaba, así ganaba tiempo! hasta fabricaba pan, lo dejaba fermentar y lo horneaba como titas finas, salado a la pimienta o dulce al dátil! Paraba de camino en alguna jaima, (tienda de campaña de pelo de camello) de algún nómada para cargar alimentos en el caso que sea posible descansar y cambiar conversaciones y a seguir. Tenía un camello de color blanco. Eran muy amigos y cómplices. Siempre hablaba de él, lo inteligente y noble que era, Le llamaba gamr. En cuando mi padre hacía cualquier gesto él respondía. Le encantaba oír la flauta, Mi padre la hacía hablar y siempre a sinfonías muy tristes en general del estilo de este vídeo.
  http://www.youtube.com/watch?v=atUkU6d9o-
En cuando le apetecía escuchar la, gamr juntaba las orejas hacía atrás, y para satisfacerlo, directamente, empezaba a tocar. Que tiempos son los de mi padre; cada vez que nos tocaba, acabamos todos llorando, mujeres, niños y hombres. Con pocas palabras y mucha música. A mi me encanta catar y todas los poemas que me ha enseñado, los cantaba al ritmo de la música y realmente era la mejor fusión. ¡Que conexión teníamos, además de nuestra telepatía! 

En 1997, vivía en Madrid, solía llamarle 2 a tres veces por teléfono cada semana. tenía plan de escaparme con amigos unos días a la sierra de acampanada. Le avisé de que no le iba a llamar en toda la semana, ya que en el lugar donde iba no había cabinas ni teléfonos públicos ya que no existían los móviles. Al tercer día y nada más levantarme, ¡sentí una necesidad de llamarle que no era normal! me agobié mucho; - Tengo que bajar al pueblo de al lado a llamar a mi padre, les dije a mis amigos. Todos respondían que no era normal lo mío y si no le había avisado de mi escapada. Les dije que si pero que no sabía lo que me pasaba y que me encontraba mal. Desde que empecé con el plan de la llamada, pasaron más de dos horas. Al otro lado y al instante, mi padre se puso  en  frente del teléfono y dijo: Si no llama ahora mismo, no es mi hijo. Directamente sonó. al responderme, - Papa, que pasa? te he dicho que voy a estar fuera unos días que pasa?

-Donde estas y que haces animal? No sé como lo hace o quien le avisa de todas mis aventuras, parecía que estaba ahí. Nos hemos alejado del mundo para tomarnos setas alucinógenas y partirnos de risa, lejos de los demás; Pero él me reprochaba los riesgos que yo asumía. Con toda la euforia que teníamos, no eramos consientes del riesgo en que nos hemos puesto la noche interior. habíamos entrado en casas, bañarnos en piscinas, hasta perder el control y llevar un perro pastor español que era tan bonito y cariños. Le llevábamos con nosotros saltando la puerta de su casa. después de disfrutar con él en la piscina de su casa que seguro nunca se habrá bañado dentro. Todo se me rebobinó   al instante. ¿como lo haces? le pregunté. Quien tiene un Dios siempre en su mente, le avisará de todo lo que ocurre o lo que ocurrirá. Me respondió.
-Ya, pero no dices: Él que tiene en el cielo un dios que le cuida, en la tierra nadie le puede dañar? Le dije. -Hijo si te tiras de un puente Dios no te puede proteger, quien cava un hoyo calle en el. ten cuidado con lo que haces, sabes que te quiero más que a nadie y no quiero desgracia ni tristeza insoportable. estas lejos de mi pero te llevo en mi mente y mi corazón, cuídate mucho; no es por ti más bien por mi y por tu familia aquí. Eres el único que esta lejos de nosotros y además el más querido hijo mío. - Vale papa, yo también os quiero más que a nadie y lo tendré en cuenta, más que nunca. respondí. 

Y esta es solo una miga de todo el pastel de telepatía que hemos vivido juntos. La más fuerte, ha sido un vieja desde el desierto, en el 2006, tenía 98 años, era un día soleado maravilloso en la salida y él decía: -Volvemos a casa que no vamos a llegar, os vais a la derriba! Yo tenía compromiso con amigos en Asilah el norte de Marruecos, Era fin de año y tenía que estar ahí.
Íbamos mi hermano su mujer y sus dos hijos detrás, mi padre y yo delante. Tardábamos tres días en llegar. una tormenta en el atlas, nos cerró el camino; ni delante ni detrás. En un pueblo pequeño encerrados y mucha gente más. Al segundo día nos daban pan los vecinos ya que los restaurantes y las tiendas no tenía suministro y esa es otra historia para contar! Donde quiere que estés, siempre iluminaras mi camino y brillaras en mi mente como el mejor diamante que nunca existió.





jueves, 9 de enero de 2014

LA TRIBU RUTQUÍ "Fátima"

Durante generaciones, la tribu Turquí la formaban nómadas del desierto, que vivían en jaimas (tiendas de campaña de piel de camello) y se desplazaban por el desierto con un tropel de camellos, cabras, gallinas, perros, gatos y hasta erizos. Cada animal tenía su función: los perros cuidaban el ganado y avisaban cuando venía alguien. los gatos cazaban todo bicho viviente que se acercaba. En algunas jaima había erizo; a los erizos les encanta las hojas de té; a cambio protegen la jaima; son magníficos cazadores, capaces de enfrentarse incluso a las serpientes. los gatos no pueden con ellas cuando las ven se ponen a maullar como locos y si consiguen arañar las, se alejaban, dejando la naturaleza hacer su función; las hormigas del desierto lo limpian todo! Los erizos en cambio, les hacen frente; su técnica de lucha es muy sencilla: muerden el animal donde sea y se encierran, la pobre serpiente se destroza con las púas.

Cuando las tribu se reunían, formaban barrios de jaimas en la explanada  del desierto, al pie de las dunas. eso cuando las relaciones eran buenas y había paz entre las tribus. Por desgracia, no siempre era así. Mucho antes de que yo naciera, cuando las tribus estaban en estado de guerra. La vida era mucho más dura. No era sólo la lucha por la supervivencia, el calor infernal del verano y el frío espantoso del invierno, la escasez de agua y alimento. <lo peor eran las guerras tribales, los jóvenes muertos en las batallas, las familias destrozadas. Todos intervenían en la batalla, hombres y mujeres. Mientras ellos peleaban, algunas daban espantosos alaridos para asustar al enemigo. Otras vigilaban que ningún hombre rehuyera la lucha: hacían una mezcla de agua y henna, con la que salpicaban los albornoces de los cobardes que huían. la gente no tenía dinero para cambiar de albornoz, así que todo el mundo les reconocía y se avergonzaba de ellos.

Casi siempre tenían que intervenir los "saiks" o "zawias", santos o místicos reconocidos por todas las tribus; sólo ellos eran capaces de detener las guerras tribales. Eran nómadas que se desplazaban de un lado a otro del desierto, predicando la paz y la oración.

Todos los turquís fueron grandes guerreros y muy buenos cazadores. Hasta los 88 años, mi padre subía todos los días a la montaña y los oasis con su escopeta a cazar ciervos, perdices, conejos.....

Antes de entrar en el ejército, la familia de mi padre fue nómada. Mi padre pastoreaba cabras; a veces pasaba semanas o meses lejos de la familia.

Cuando se hizo militar, le dieron una casa, a la que se trasladó con toda su familia: su primera mujer, sus tres hijas, su madre, dos hermanos, sus mujeres y hijos. Estaba casado con una prima suya de Bechar Argelia. Poco tiempo después del traslado a la nueva casa, se divorcio de ella. El motivo quizá no parezca importante para la mentalidad occidental, pero para él fue cuasa de divorcio. Una tarde que él  salía de la base militar, vio, a lo lejos, a su mujer con sus cuñadas. su mujer llevaba la cara descubierta; no le importó, pero le llamó la atención, porque ella siempre se cubría con el velo. al verle la pobre a toda prisa se cubrió y era el gesto de la separación!
--¿ De quién te escondes? - le preguntó cuando se encontraron-. ¿te escondes de mí, y no de los demás? Ya no quiero seguir siendo tu marido. La repudió  al instante. Ella lo hizo por miedo y a él le rompió el corazón su comportamiento. Mi abuela y mis tías intercedieron por ella, pero la decisión de mi padre era firme. - llévate todo lo que quieras de la casa, estas divorciada, Le dijo.
La pobre mujer cogió a sus hijas y volvió a Bechar, con su familia. Para él, era un caso cerrado.

Poco tiempo después, mi padre encargó a mi abuela que le trajera una nueva esposa. A un occidental, esta clase de comportamiento quizá le parezca extraño, pero así es como se hacía, no sólo en el desierto, sino en casi todas partes de los países del norte de África. Y no puede decirse que los matrimonios funcionen peor que en el resto del mundo. Mi abuela fue a Bechar, se entrevistó con unos familiares, los cuales estuvieron encantados de entregar a su hija a un hombre de la tribu Turquí.  Poco tiempo después, mi padre se casó con la que luego sería mi madre. era hija de un buen amigo, que era vecino de la familia; Tenía casi de la misma edad de mi hermana mayor, lo curioso de la vida que siempre que salían de la base militar hacía sus casas, mi padre levantaba mi madre sobre los hombros y mi abuelo llevaba a mi hermana igual. Una de las veces le dijo mi padre a mi abuelo: ¿Elgazi te imaginas que me caso con esta criatura? En plan broma, y el destino quiso que así sea! A mi padre le sorprendió mucho y era doble alegría un deseo cumplida y la hija de un buen amigo.

Fátima, se llamaba. No tuvo suerte, mi madre; no fue bien recibida en la casa familiar; las mujeres añoraban a la otra mujer, y se lo demostraban siempre que podían, encima era demasiado espiritual, su padre era sabio del Corán y su interior marido es un Imam (cura), y solo adoraba a dios mientras los demás sólo querían disfrutar de la vida. La dejaban sola, que no le importaba mucho, se marchaban sin decirle nada, lo peor que le echaban pintura roja en la comida y decían: ¡como no ve nada echa pintura roja en vez de pimentón dulce! Se lo hicieron pasar muy mal. Ella tenía un fe impresionante, nunca se quejaba de nada, pero eso no hacía más que echar leña al fuego. Llegó un momento en que la convivencia fue imposible. Todo el día gritos, quejas, reproches. Una tarde mi padre llegó del mercado con la chilaba cargada de zanahorias, nabos, pimientos y patatas. Encontró a las mujeres alborotadas, gritando todas a la vez. ¡ No queremos a esta mujer! ¡Nunca recoge nada! La reacción de mi padre fue proporcionada al alboroto:
-¡que no recoge nada! Pues entonces.... ¡toma nabos!-, y todo lo demás. sin dejar de gritar, lleno el patio de verduras, y antes de marcharse, les dijo: ¿sabéis lo que os digo? Que si el problema es que no recoge nada, contrataré el servicio para que vaya detrás de ella.

la convivencia entre las mujeres era imposible. 
-Hijo mío, tienes que divorciarte - le dijo mi abuelo poco tiempo después.
-No pienso, ¿te falta respeto mama?
-Por dios hijos para nada! delante de mi no dice ni mu y delante tuya tampoco.
-Entonces de donde viene mu mama.
-Pues entonces, tendrás que marcharte. No puedo vivir así. No puedo más y no quiero más problemas. 

Mi padre se sintió tan dolido que jamás se le pasaba por la cabeza alejarse de su madre y sus hermanos. La familia tenía una tienda de alimentación, en cuya trastienda había una casa preparada para ser habitada. Mi padre abandonó a la casa familiar y se trasladó allí con mi madre y mis hermanos. muchos años más tarde, en el patio de esa casa nací yo.

Las demás mujeres estaban tan dolidas y fastidiadas; decían - ahora si que le va muy bien a la hija del Gazi, su propia casa y con la tienda para su servicio! realmente es a ella que las cosas han ido muy bien! Después de décadas y en cuando mi madre estaba en el lecho de la muerte, todas le pedían perdón y ella siempre con sonrisa les decía: ¡Os he perdonado desde siempre y os pido perdón por todo el daño que os he causado!




miércoles, 8 de enero de 2014

PUNTO NEGRO-El MÍSTICO

Los pensamientos son el motor de la vida y la existencia! sin ellos nada sera lo que es ahora. Somos capaces de realizar cualquier cosa gracias a la fuerza del pensamiento y conseguir el equilibrio entre este último y la realidad. Realmente si conseguimos el punto G entre ambos, podríamos hacer lo que nos da la gana y lo inimaginable. De las historias de mi padre que más me han impactado son de sus amigos místicos o santos como les llamaba él.

Sidi el Madani se le puede llamar el alma gemela de mi padre, según nuestros costumbres aquí en el occidente. Eran uña y carne, tenían un compromiso entre ambos hasta enfrentarse con el creador, cada encuentro después de separación de duración larga,  se cruzaban los dedos detrás de la nuca del otro y se juntaban los labios. (Mi padre me decía: Eres el único hombre que me ha besado los labios después de Sidi el Madani. A mi mi chocaba lo que me decía porque no era mi caso, saludaba a casi todo el mundo en la boca). Después se cruzaban los dedos de sus manos derecha y se miraban fijamente a los ojos y decían a la vez: es un compromiso hasta encontrarnos con Allah(Dios). La verdad, se querían mucho y se amaban, creían en que si tienes un amigo y realmente hay amor sin apego ni interés ganaras un lugar en el cielo cerca de tu amigo!

Una de las veces, en pleno verano, en Tuat en el desierto de Argelia estaba el Ángulo (Zawya, místicos religiosos se basan en el sufismo en todo.) de Sidi el Madani de visita. Nada más llegar a la tribu, todo el mundo le hablaba de los 3 hombres que se fueron ya hace 6 días a la búsqueda de agua que faltaba para toda la vecindad y que no se sabía nada de ellos. Tenían que haber vuelto hace ya 3 días y todo el pueblo estaba sediento y muy preocupado. Uno de los ausentes era muy amigo de Sidi el Madani, entonces el dijo: tranquilos mi amigo esta bien lo sé y si le ha corrido algo seré el primero en saberlo! Aun así la gente estaba muy agobiada sin saber que hacer. Pasaron dos días el agua que ha traído el ángulo estaba casi acabada. Los niños sin importarles nada jugando en la plaza mayor del pueblo y el místico con mucha gente al rededor se levantó tranquilamente y se acercó a los niños y les dijo: Iros a recibir a vuestros padres que ya están de vuelta.

 Todos como flechas hacía la nada porque no se veía a nadie. Al pasar a su lado la hija pequeñita de su amigo la llamo: niña ven aquí. En cuando estaba en frente de él la levantó y la puso sobre su rodilla y le dijo: en cuando ves a tu padre y después del abrazo, pregúntale por los tres nudos que tiene en su mochila. La niña impaciente para  atrapar a los demás niños, le dijo: vale señor y se fue corriendo y a lo lejos se veía el contraste y el movimiento de las sombras de los hombres y sus camellos. La alegría cubrió todo el entorno y las mujeres salieron con alaridos para recibirles y repartir agua sobre todo a la gente que ya llevaba buen rato sin beber. En cuando estaba en sus brazos, directamente la niña se fijo en los hilos que callen de la mochila de su padre y le dijo: Papa de donde vienen estos tres nudos? Muy sorprendido le dijo: ¡Era Sidi el Madani y son mis tres gritos hija mía!

El encuentro entre el místico y el amigo era el más caluroso que nunca han tenido.
El ambiente ya era distinto y las caras de todos han cambiado y después de descansar un rato en la casa del amigo tomando té todos preguntaban por lo ocurrido. Entonces les contó el milagro que les pasó. Al llegar al pozo habitual, estaba completamente enterrado y totalmente desaparecido! Muy cansados y con mucha sed decidieron seguir buscando otro pozo. Porque era imposible para ellos volver sin agua. Hacía mucho calor entonces durante el día usaban sus camellos como sombrillas y sin hacer mucho esfuerzo para no gastar energía, esperaban a que el sol no estaba muy alto para seguir buscando entre las zonas bajas de las dunas. Soltaban a los camellos a su bola ya que se supone que el camello cuando tiene sed va directamente a la zona donde esta el agua más cerca pero sin éxito. Cada vez tenían menos esperanza y el miedo se apoderó de ellos. El calor infernal el aliento asfixiado, era el fin y no había salida les pareció. En muchas ocasiones veían el espejismo del agua y sin salida sintieron y vieron la muerte que les rodeaba por todas partes. El amigo tumbado con la parte superior de su cuerpo en la sombra de uno de los camellos, retomó sus últimos esfuerzos y gritó: Sidi el Madani, Sidi el Madani, Sidi el Madani, estamos en las manos de Allah (Dios) y en tus manos. Pasaron unos minutos y nada más abrir los ojos se fijó en un punto negro en lo más alto del cielo, sintió un escalo frío por todo el cuerpo y no supo explicar lo que le pasaba. Al rato se dio cuenta que el punto cada vez se hacía más grande y más cerca. Entonces les llamó a los demás: Hermanos veis lo que estoy viendo en el cielo? Con mucho esfuerzo levantaron las miradas al cielo y esperando. El punto bajaba poco a poco convirtiéndose en un torbellino giratorio circular bajando justo sobre ellos. Empezaron a ver relámpagos y truenos. Sintieron el frescor de la brisa primaveral y sintieron la salvación. De repente estaban en el medio de la tormenta más fuerte que han visto en toda su vida. Agua por todas partes, lo que era gotas mojando les los labios se convirtió en el chaparon más impresionante. Uno de los hombres estaba tan desesperado. llenó uno de los cubos que usaban para rellenar las pieles de cabra que eran y siguen siendo los depósitos de agua de los nómadas, de un trago bebió sin parar, nada más sentarse el agua en su estómago, salió un chorro abrasador que alcanzó a su amigo que estaba en frente gozando de la bondad de la naturaleza inesperada. La madre que te parió, me has abrasado! le Grito. Tenía el estómago vacío y a alta temperatura hizo una reacción reversible. En estos casos hay que mojar los labios y beber tragos muy pequeños y repetidos hasta que el estómago coge su temperatura normal y ya se puede beber normal. Los hombres no  se lo pudieron creer, llenaron sus depósitos, saltaron y gritaron de alegría. Cargaron sus camellos, retomaron el camino de vuelta lo más rápido sin poder explicar lo ocurrido y solo repetían alabanzas al creador y a la vida por la segunda oportunidad que les dio.
Quién puede desmentir la realidad vivida de estos hombres, da la casualidad que mi padre es muy amigo del amigo y aunque no podía desmentir las historias de mi padre, siempre no podía clasificar-las hasta que últimamente apareció Dinamo; ¡el mago más potente que se ha visto jamás! Entonces todos los cuentos de mi padre brillan más en mi mente y se han convertido en realidades sin lugar duda. gracias padre y sigue donde estas iluminando mi camino y alegrando mi vida. te quiero hasta encontrarnos Incha Allah ( si Dios quiere)